sábado, 13 de marzo de 2021

REFLEXIÓN: MARCOS 1, 40-45 P. STÉFANO CARTABIA OMI. (URUGUAY)

     

Marcos 1, 40-45

 
La lepra, al tiempo de Jesús, era una terrible enfermedad. No solo por las consecuencias físicas, sino y sobretodo, por las consecuencias sociales y religiosas. El leproso vivía en una marginación radical: excluido de la sociedad y excluido del acceso a Dios.
El libro del Levítico era claro y contundente: “La persona afectada de lepra llevará la ropa desgarrada y los cabellos sueltos; se cubrirá hasta la boca e irá gritando: ¡Impuro, impuro!. Será impuro mientras dure su afección. Por ser impuro, vivirá apartado y su morada estará fuera del campamento” (13, 45-46). Leer más...

 

Mil gracias Padre Stefano. Un poco tarde por el arreglo de mi compu, pero para las cosas de Dios, para mí nunca es tarde. Mil gracias y felices Pascuas.

Elsa Lorences de Llaneza.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario