Cuando contemplo Tus ojos y Tu cálido mirar
me asomo un poco al Abismo de Tu interioridad,
allí me nutro en silencio de la Fuerza de Tu Paz,
de Tu Fuego apasionado y de Tu extrema humildad.
Y comulgo con Tus sueños, con Tu entrega y Tu dolor
haciendo mía Tu Palabra, Tus gestos, toda Tu acción.
Siento de pronto la urgencia de que venga ya Tu Reino
y así me voy sumergiendo en Tu Espíritu de Amor.
Por éso Jesús, yo adoro Tu amado Cuerpo y Tu Sangre,
Tu voz, Tus pies y Tus manos con las marcas de los clavos,
Tu herida en aquel costado, Tus latidos y Tus pasos...
"pero más amo Tus ojos porque es a través de éllos
que cual ventanas del alma, puedo ver Tu Corazón "
Que Tu mirar sea "Faro" que ilumine mi camino
y que al ver en lo profundo mi "nada" con compasión
me convierta en fiel amante y me colme con Tu Don.
Susana Mirta Piñeiro
Plottier (Prov. del Neuquén)
mirtapieiro@hotmail.com
Gracias Susana por tu poema. Bendiciones.
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