Tocaron
todas las puertas
No se
abrieron los candados
El
corazón de la gente
Como
piedra se ha cerrado.
Solo
un asno y un buey
O tal
vez un dromedario
Le
cedieron el espacio
Como
gesto solidario.
San
José se ha puesto triste
Porque
no pudo encontrar
Un
lugar más adecuado
Para
el niño en navidad.
No se
empañe la alegría,
Ven José
a festejar
Que
el niño Dios ha nacido
Y nos
viene a rescatar.
Un
lucero luminoso
Ilumina
con su luz,
La
carita más preciosa
La
del niñito Jesús.
Un
coro de angelitos
Canta
el más bello canto,
Dando
alabanzas al niño
El más
santo entre los santos.
Un
colchoncito de hierbas,
Una
manta de rosarios,
El
amor de una madre,
un
pesebre es el sagrario.
Raquel Olay de Leanza
Café literario de Neuquén
“Refugio del silencio y la Palabra”
Café literario de Neuquén
“Refugio del silencio y la Palabra”
Gracias Raquel por tu colaboración al Blog. Esperamos muchas más.
Bellísimo poema de un alma sencilla y pura....Gracias !!
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