RECORDANDO: PADRE HERNÁN PÉREZ ETCHEPARE.

PADRE HERNÁN PÉREZ HETCHEPARE

A CINCO AÑOS

Hernán: hoy 27-1-2017 se cumple otro año más que Dios te llevó de nuestro lado. Qué rápido pasan los años querido amigo, pero tu recuerdo sigue flotando entre nosotros, tus poetas huérfanos.

Yo sigo tratando de conservar tu memoria, no quiero que nadie te olvide y que, si es posible, cada vez te conozca más gente.

Quiero compartir contigo una Diosidad que pasó a fin de año. El 26 de Diciembre 2016, me distinguieron con el título de “Académica” en la Academia San Faustino de Salerno Italia. Así está redactado:

“Tenemos el agrado de dirigirnos a Ud. A fin de notificarle la admisión como “Académica” en nuestra Institución con todos los derechos y obligaciones previstos en el estatuto:

Su labor incansable en el área literaria como colaboradora y pilar esencial en el camino del Padre Hernán Pérez Etchepare + (QEPD) sumada a una profunda evangelización de la cultura le han hecho merecer esta distinción con creces (SIC)

¡Académica yo por ser un pilar tuyo! Evidentemente se han equivocado. Tú fuiste eso para mí. Tú  fuiste el que me enseñó como amar a los poetas, porque tú los querías con el alma y el que te conocía ya nunca más dejaba de ir a verte para estar contigo.

Pero no solo esto pasó el 26, me condecoraron como Madrina de poetas y a ti como amigo de los poetas. Me hubiera gustado que estuvieras en el Café Tortoni con nosotros. Te hubieras reído mucho con Eva Lucero de Ortega y con Ezequiel Toti, el muchacho que, orgulloso y dolorido hasta sus entrañas, te llevó hasta casi tu última morada.

Pero no terminó todo aquí, hubo algo más que seguro te hubiese enorgullecido: Eva me dio en custodia la Bandera de las Letras por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Hubiera estado lindo haberla hecho flamear en el “Café del Abrazo Literario” porque esa bandera pertenecía a ese lugar. ¡Qué lugar amigo querido! ¡Cuánta gente aún lo añora! Ahora está entre mis cosas que pertenecieron al Café y que yo guardo con tanto cariño.

Yo  sé  Hernán que no valgo mucho, que lo que soy fue porque tú me empujas para que nunca se pierda tu recuerdo y que siempre estás a mi lado para que no decaiga.

En algún momento dije: “Qué lástima que Hernán no está con nosotros compartiendo la tarde “y me equivoqué porque Eva me dijo: “Se sintió a Hernán Madrina”. Y es cierto, tú estabas llorando y riendo porque así eras, profundamente emocional.

Estoy segura que estarás leyendo esto a los poetas, nuestros amigos, que lamentablemente ya partieron y que son muchos. Dales nuestros saludos y diles que los recordamos siempre, como te recordamos a ti.

Tal vez el año próximo halla más novedades y pueda contártelas ¡Quién sabe! Yo creo mucho en las Diosidades.

Que descanses en Paz querido Padre Hernán Pérez Etchepare. Te lo mereces. Cuida a tus ovejas, los poetas y que cada día estemos más unidos con Lazos de Arte y Amistad. Amén.

                     Elsa Lorences de Llaneza

                    elsalorences@yahoo.com.ar.