En el Plan de Dios, todo encaja a la
perfección. De ese modo, la existencia de místicos
dentro de la Iglesia complementa la revelación pública, esto es la Biblia, sin
cambiar una coma de lo que allí
dice, sino dándole mayor nivel de detalle para auxilio de esta generación.
Es en este espíritu que
debemos leer mensajes y revelaciones, sin una curiosidad malsana, sino
alimentando nuestro amor por la Iglesia, en Jesús, por
María.
María Valtorta
tuvo muchísimas
revelaciones, las que se volcaron en su libro "El Evangelio como me fue revelado", el cual publicamos
en su totalidad.
Los invitamos a leer los segmentos
que relatan la visión de
la Asunción de María, los cuales los encuentran en el último
libro de la colección, página 111.
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