La persona que tiene los ojos más puros del mundo
"A toda hora estabas ahí,
con tu pequeñez, haciéndote sentir
tal como si intuyeras desde allí,
que serías el sosiego para mi sufrir.
A toda hora te sentí
tan mía, tan cerca de mí,
con esa certeza de que sería así:
mi dicha, mi alegría de vivir.
Tan indefensa y compartes mi sentir,
con tan sólo mi voz oír
y mi júbilo, mi temor sueles compartir
y eres como el cielo amplio, sin fin.
Ya desde mi vientre supe presentir
que serías siempre para mí
ese ángel que para mí, Dios
tenía reservado, para volver a reír.
Porque tú como el sol, tan feliz,
la inmensidad del mar, eres al sonreír,
porque como un rayito de sol, así,
con tus pupilas, siempre vuelvo a ser feliz."
Elsita Solari
Gracias Elsita por tu poema tan sentido para tu hija.
FOTOGRAFÍA: Inés Gallardo Grau
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