"MOLINOS DE HOLANDA"
Las sombras de la noche se dispersan.
Asoma tímida aún la aurora y se levanta.
Bosteza el canal mientras se despereza
y comienza la labor de la mañana.
Prepara su barca sin prisa, el jornalero
y se desliza sereno sobre el agua
te presiento llegar desde la orilla
sobre las piedras, tus zuecos retumbando.
Las aspas del molino están dispuestas
el viento que acaricia, las abraza
y esperan las semillas en su vientre
para que tú, mujer, las recojas con tus manos.
Dejaste atrás los campos y las flores
y a tus niños metidos en sus camas,
solo escuchas la voz de la molienda
que olerá a pan cuando vuelva a tu casa.
Te abrochas el delantal y me sonríes
y le cantas al amor mientras trabajas.
Te bendigo molinera, por la vida
que compartes conmigo, codo a codo sin cansarte.
Sarah Petrone
Hermoso tu poema Sarah. Mil gracias por compartir. Elsa Lorences.
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