CUATRO COPLAS A NUESTRA SEÑORA DEL HUERTO
El Hospital Rivadavia,
donde es dolor la consigna
para acceder a sus salas,
tiene entre el verde una ermita.
La Virgen del Huerto en andas
va al paso hoy por la capilla,
como esperando que el día
en su noche encienda un alba.
Frente a Su imagen erguida
para mirarme de frente,
maternal y compasiva,
la oración brota a torrentes.
Y ante el trono florecido,
me arrodillo en cuerpo y alma,
¡Reina de las Siete Espadas
y de su Huerto bendito!
Carlos María Romero Sosa.
Bello como todo lo que usted escribe querido poeta. Bendiciones. Elsa Lorences de Llaneza.
Muchas gracias, estimada y bien valorada poeta amiga Elsa. Bendiciones
ResponderEliminarDebí firmar el anterior mensaje, lo hago ahora, Carlos María Romero Sosa
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