domingo, 10 de diciembre de 2017

VIVENCIA PERSONAL: MI VIAJE A CHASCOMÚS 8-12-2017

VIVENCIA PERSONAL

MI VIAJE A CHASCOMÚS DEL 8- 12-2017

Y por fin llegó mi día tan esperado. Hacía meses que lo esperaba con ansias y con miedo porque dudaba que mi salud  respondiera a mis expectativas.
Me venía encomendando a María, mi amada Madre y ella en su día me escuchó
Me levanté temprano como nunca y a las 7 de la mañana ya estaba Javier (mi hijo) tocando el timbre. El nos iba a llevar a Chascomús a mi esposo y a mí.
Llegamos a Chascomús cerca de las diez de la mañana. Buscamos la plaza principal. Yo ansiosa miraba a ver si veía a Eva y no me daba cuenta que entre unas cuantas personas reunidas en la plaza estaba ella. Mi hijo me la señaló.
Estaba invitada a Chascomús para recibir el premio “Mercedes Josefa Aldalur”, que consistía en la entrega de mi primer niño literario. Tengo publicadas diez Antologías, pero ningún libro que recogiera solamente mis trabajos literarios. Pero mi necesidad de llegar a Chascomús no estaba en la ilusión de recibir el premio, mi ilusión más profunda estaba en encontrarme con amigos que no veía desde hacía años.
Me bajé del coche, me envolví en la bandera de las letras que se me otorgara en custodia por CABA y a la velocidad que me permitieron mis piernas me acerqué al grupo y antes de llegar grité: Eva Lucero de Ortega: había que venir de blanco a este cumpleaños. Ella (de negro) se dio vuelta y riéndose se abrazó a mí ¡Tanto tiempo sin verla! Nos mirábamos y nos volvíamos a abrazar. Era como que no podíamos creer que por fin había llegado el día.
Luego el abrazo con su esposo y su hijo. Interminables preguntas de personas que se encuentran después de tantos años.
Eva me presentó a autoridades del área cultura de Chascomús. Lamentablemente no recuerdo sus nombres, sí el del Profesor Pablo Nápoli, Director Municipal de Cultura que fue quien me entregó el Diploma correspondiente y a quien agradezco muchísimo que se haya quedado hasta el final del acto.
Bueno continúo lo anterior. Había dos mástiles en la plaza. En uno se izó la bandera de la Patria y en el otro la de las Letras y me llamaron a mí para ayudar con la segunda, pero antes de eso me abracé profundamente con Julio Ruffino un Gran poeta chaqueño que hacía casi 10 años que no nos veíamos. ¡Qué lindo fue ese abrazo! En el abracé a todos mis amados poetas del “Café del Abrazo Literario”
Luego de izar las banderas estalló un fuerte aplauso de la gente allí reunida que yo dediqué internamente a Eva porque bien merecido que lo tenía. Una vez terminada esa ceremonia y cuando ya cruzábamos para la Casa de Campo, apareció otro querido amigo: Ezequiel Sebastián Toti, de cuyas manos recibí meses atrás el título de Académica de la “Academia San Francisco de Salerno Italia” a quien también hacía mucho tiempo que no veía. El fue a entregar los premios  “Príncipe Oddone Di Savoia a las Artes”.
 Lo del salón donde se hizo mi presentación, por humildad, no contaré mucho, eso espero que lo haga alguno de los que estuvieron presentes.
Todo pasó como una ráfaga de viento puro. Me senté delante de un grupo de gente que me miraba con curiosidad. No sé si eran poetas, escritores o invitados. No recuerdo tampoco lo que dije pero me sentí nuevamente frente a los poetas del “Café del Abrazo Literario” y con Eva de pie a mi lado no pude menos que nombrarlo a él, mi querido Padre Hernán Pérez Etchepare, porque yo estaba en ese lugar con los dos hacedores de sentirme llamada poeta: Eva Lucero de Ortega  y mi amado Padre Hernán cuyo espíritu sentí conmigo. Me entregaron los libros y un hermosísimo diploma con los que recordaré siempre mi paso por Chascomús.
Luego Eva nos homenajeó con un vino de Honor en el que estábamos todos juntos, conocidos o no, compartiendo un rato de Confraternidad.
Lamentablemente no me pude quedar al resto de los diversos actos preparados, porque el efecto de mi calmante estaba llegando a su fin y me tuve que retirar con mucha pena en mi corazón y pido disculpas a Eva aunque sé que me supo comprender.
Eva querida: quiero que sepas que me hiciste muy feliz y como digo en mi Libro: “Poemas y Relatos de una intensa vida”  “YA DIOS ME PUEDE HACER CAER DE LA CORNISA”




Y así termina la historia de este día en Chascomús. ¡¡¡Mil gracias Eva Lucero de Ortega nunca podré pagarte este día en tu tierra bendita. Dios te bendiga con salud y trabajo hoy y siempre!!!!


Elsa Lorences de Llaneza
elsalorences@yahoo.com.ar.  

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